La castellonense confiesa que quiere «disfrutar de este deporte y seguir mejorando para seguir compitiendo a este nivel»
Azahara Beroy | Castellón | 10-05-2018 | 11:00h
Noelia Masiá Llanes (Burriana, 1998) empezó a dar sus primeros pasos en el equipo de baloncesto del colegio Salesianos de Burriana. Sus ganas de seguir disfrutando de este deporte le llevaron a jugar en el Ros Casares y el Nou Bàsquet Femení Castelló, equipos de los que guarda un gran recuerdo. Su ambición por seguir creciendo la llevó hasta el Picken Claret, debutando así en Liga Femenina 2 y llegando a disputar una fase de ascenso a la máxima categoría nacional.
Empezó a jugar al baloncesto en el colegio Salesianos de Burriana. ¿Qué es lo que más le cautivó de este deporte?
Empecé a jugar en Burriana porque un verano fui a un campus y después me llamaron. A partir de ahí mi interés fue creciendo y lo único que me apetecía entre semana era acabar el colegio e ir corriendo a entrenar con mis compañeras en el patio de los Salesianos. También es verdad que fui de las últimas en llegar y casi todas mis compañeras de aquel entonces, que las suelo recordar mucho como a Carlota, Carmen, Andrea o Sara, ya tenían un nivel bastante superior al mío. Por tanto, yo sólo quería mejorar para poder entrenar como ellas y eso fue lo que me motivó para seguir jugando.
En su etapa de formación también pasó por el ya desaparecido Ros Casares y el Nou Bàsquet Femení Castelló. ¿Qué recuerdo o recuerdos destacaría de aquellos años?
En el Ros Casares tengo un muy buen recuerdo de cuando quedamos campeonas de la Comunidad Valenciana en la Final Four. Fue muy emocionante el último partido contra San Blas de Alicante y, además, ha sido el único año que he podido optar a una primera posición en la liga Valenciana. Mientras que en el Nou Bàsquet Femeí Castelló, sin duda, me he sentido como en casa todos y cada uno de los años que he estado allí y me atrevería a decir que con ellos cada día que pasaba era especial. De esos años me quedo con mis compañeras y amigas, y con grandísimas personas como Álvaro y Lola. Y a nivel deportivo fue el primer año que, siendo cadete de primero, participé en la Final Four Júnior de Alicante.
En categoría Júnior ya aterriza en el Picken Claret. ¿Qué le atrae a este equipo y qué le motiva a seguir en Claret hasta la actualidad?
Lo que me llevó a Claret fueron mis ganas de seguir creciendo como jugadora. Me caracterizo por ser una persona que nunca tiene suficiente y siempre quiere más, hasta el punto de ir a Valencia todos los días desde Castellón, cosa que agradezco eternamente a mis padres y mi hermana que siempre han estado conmigo y me ha animado a ello.
Con el Claret consigue dar el salto a la Liga Femenina 2. ¿Cómo vivió el debut en la segunda división? ¿Y cómo valoraría su primer año en LF2?
Mi debut en Liga Femenina 2 fue siendo Júnior de segundo año en el primer año que Claret estaba en Liga Femenina 2 y lo recuerdo como un momento especial, pero también un momento muy tenso y que viví con muchos nervios. Al ser Júnior, para mí el poder debutar en LF2 fue todo un regalo por el trabajo hecho durante la temporada y que me sirvió de mucho para ver más allá el baloncesto y poder cogerlo con más ganas.
En el Picken Claret habéis realizado una gran temporada, clasificándoos para la fase de ascenso a Liga Femenina. ¿Cómo ha vivido la experiencia?
Esta temporada ha sido impresionante en todos los aspectos. La verdad es que ha sido mi primer año fuera de casa y he compartido piso con Juana, Paula y Sofía, aunque esta última se tuvo que ir en diciembre a Estados Unidos, y me he sentido genial. Con ellas no me ha faltado nunca de nada y se lo agradezco. A nivel deportivo hemos sido un equipo con muchas limitaciones económicas, pero aun así hemos demostrado que todo se puede conseguir con ganas y con ilusión. Eso es lo que me llevo de este año, del club, de los entrenadores y de mis compañeras, que a pesar de todo no nos hemos venido abajo en ningún momento y hemos estado siempre apoyándonos. Así que sólo por eso quiero darles las gracias a todos por hacer de esta temporada un recuerdo que me ponga los pelos de punta.
La derrota contra el Valencia Basket os condenó un poco en la fase de ascenso, ya que os obligaba a ganar de +18 el siguiente partido. ¿Pesa más la derrota o valoráis más la gran temporada realizada?
Para nosotras llegar a la fase de ascenso fue todo un regalo y lo único que podíamos hacer era disfrutarlo tal y como lo habíamos hecho toda la temporada. Es un partido, una competición. Unas veces se gana y otras se pierde, y como a todo el mundo que compite, nos hubiera gustado ganar, pero el Valencia es un gran equipo y nosotras no nos quedamos con la derrota sino con que hicimos todo lo posible por competir y dar lo mejor de nosotras.
Más allá de lo deportivo, según datos ofrecidos por el Valencia Basket, más de 4.000 personas han ido a ver la fase de ascenso a Liga Femenina. De hecho en el derbi Valencia-Picken se cifraron 4.600 espectadores. ¿Cree que ya ha ganado el baloncesto femenino o aún falta mucho por hacer?
Se vio que Valencia tenía muchas ganas de baloncesto femenino y no sé si el baloncesto femenino ganará o no, solo sé que poco a poco se van consiguiendo cosas y desde luego nadie se podría imaginar a tantas personas ese fin de semana. La verdad es que espero poder ir el año que viene y ver la Fontenta llena y animando y apoyando al baloncesto femenino.
A nivel personal, ¿cómo se está encontrando en su actual equipo?
En todos los clubes que he estado me he sentido muy bien. Este año, a nivel deportivo, el último tramo de temporada no ha sido tan bueno como el resto, pero es algo que me servirá para crecer de cara a la siguiente temporada.
¿Qué aspiraciones o metas se propone a corto plazo?
Lo que me propongo a corto plazo, sobre todo, es disfrutar de este deporte y vivirlo al máximo. A parte de eso, me gustaría seguir mejorando y tener la oportunidad de seguir compitiendo a este nivel. Creo que es algo por lo cual merece la pena seguir trabajando y esforzándote, para que te dé momentos como los que me ha dado a mí esta temporada.
