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Carla Masip: «La clave de los éxitos es el trabajo diario y el no rendirse nunca»

Actualizado: 22 may 2018

La atleta confiesa que su próximo reto es «hacer la mínima para participar en los Juegos Mediterráneos Sub-23»


Azahara Beroy | Castellón | 08-03-2018 | 16:30h

Carla Masip Gimeno (Benicarló, 1997) lleva cosechando éxitos en las pruebas de 800 metros y 1.500 metros prácticamente desde que se dedica al atletismo. La atleta del CE Vinaròs, a sus 20 años, ya ha cosechado grandes éxitos en diversos campeonatos autonómicos y universitarios. Además, Carla Masip se proclamó campeona de España promesa en 1.500 metros tanto al aire libre como en pista cubierta en 2017, y recientemente se ha colgado una medalla de oro en el XXXIII Campeonato de España Sub-23 en Pista Cubierta en 1.500 metros y una presea de bronce en el LIV Campeonato de España Absoluto en Pista Cubierta en 1.500.


¿Cómo empezó en el mundo del atletismo y qué es lo que más le gusta de este?

Empecé hace 10 años cuando dejé de jugar a fútbol porque a partir de cierta edad ya no nos dejaban a las chicas jugar con los chicos en el equipo mixto, y me pasé al atletismo porque una amiga lo practicaba. Lo cierto es que lo que más me gusta es las relaciones que llegas a forjar en este deporte y el hecho de viajar a varias ciudades, que te permite hacer turismo y eso también me gusta.


Recientemente se ha proclamado campeona de España sub-23 en 1.500 metros. ¿Cómo afrontó el campeonato?

Justo para este campeonato habíamos preparado la prueba de 800 metros, pero tres días antes cambiamos de prueba porque vimos más fácil ganar la de 1.500. Lo cierto es que al campeonato no llegaba en mi mejor estado de forma, pero iba con muchas ganas y encima cuando tienes una motivación extra al final llegas a conseguir lo que te propones.


Y siendo que iba a competir en la prueba de 800 metros y la prueba de 1.500 requiere más fondo y quizás más preparación táctica, ¿cómo se toma esa decisión de cambio a tan sólo tres días?

En 800 hacemos más velocidad y series cortas y en 1.500 es más larga, pero como realmente los campeonatos no se corren a tope desde un principio ya que son carreras tácticas, sino que corres, más o menos, los últimos 300 metros rápido, como pasó en Salamanca, la preparación que llevas del 800 funciona. Si alguien hubiera salido tirando a muerte desde el principio está claro que ya no me hubiera valido tanto y hubiera sufrido más, pero en un campeonato nadie suele tirar desde el principio.


Una semana más tarde se colgó la medalla de bronce en el Campeonato de España Absoluto en 1.500 metros. ¿Se imaginaba conseguir este metal? ¿Dónde está la clave de esos éxitos?

Sabíamos que el oro y la plata eran imposibles porque había dos atletas que una tenía la mínima mundial absoluta y la otra se quedó a las puertas, y el bronce estaba abierto entre unas cuantas atletas, claro todas íbamos a luchar por el bronce. La verdad es que sabía que tenía oportunidades pero realmente no te lo llegas a imaginar hasta que no lo llegas a conseguir, y cuando lo conseguí fue una alegría muy grande. Y creo que la clave de los éxitos es el trabajo diario, la constancia y el no rendirse nunca.


Personalmente, y teniendo en cuenta que todas requieren un gran esfuerzo, ¿en qué tipo de pruebas disfruta más compitiendo?

Creo que las pruebas que más me gustan son las que me dedico ahora, que son 800 y 1.500 metros pero no es que me desagraden las otras. Es cierto que prefiero hacer carreras y estar corriendo todo el rato, que es lo que más me gusta y más libertad me da, que hacer saltos o lanzamientos. Y a la hora de correr esas distancias son lo mejor porque por ejemplo ahora hacemos croses de entre 6 y 10 kilómetros y las hago porque lo tengo que hacer pero no es algo que me guste, al igual que las series cortas que no me acaban porque no tengo la sensación de cansarme


¿Quién diría que es la persona que más le ha influido o apoyado a lo largo de su trayectoria deportiva?

Creo que mi entrenador Xavier Fontelles. Realmente él es como mi segundo padre y es el que me anima y me ayuda día tras días. A veces pasa que la gente que está a tu alrededor te apoya pero a lo mejor los días que te van bien sólo, pero mi entrenador está los días que no te salen bien y los días que sí, y al final es el que más me conoce y el que más sufre y disfruta conmigo.


Recientemente fue galardona con el premio a la excelencia académica y deportiva de la Fundación Trinidad Alfonso. ¿Cómo combina los estudios y el deporte?

Sí que es cierto que cuando llegan las competiciones importantes, que a veces se juntan con los exámenes, tienes un poco más de estrés en el cuerpo. Pero como me organizo bastante bien y desde el primer día me pongo a hacer faena y a estudiar por las tardes cuando llegan los periodos de exámenes tampoco voy con un estrés al máximo. Digamos que no lo dejo todo para última hora.


Y en el plano deportivo, ¿cuál es su próximo reto?

El próximo reto es hacerme la mínima para participar en los Juegos Mediterráneos Sub-23, que se celebran en Italia. La mínima ahora está en 4:20.00 y yo tengo de marca 4:20.46, es decir menos de medio segundo.

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